A menudo leemos en los periódicos noticias sobre madres que deben devolver a los hijos a un padre condenado por malos tratos. Se nos ponen los pelos de punta. Nadie quiere que los menores vivan en un ambiente de maltrato.
¿Es que estas madres no están protegidas? Es aquí donde el sistema jurídico a veces cuesta entenderlo: no es que las madres tengan que seguir viviendo con el maltratador, ni que tengan que seguir viviendo en ese país extranjero, sino que el juez competente para resolver sobre la residencia y el régimen de custodia de los menores es el Juez del lugar de residencia habitual. Esto es, el país donde vivían antes de que la madre saliera huyendo de ese país.
¿Cómo se pueden proteger estas madres? Antes de salir huyendo del país, deben pedir autorización judicial de cambiar la residencia de los menores.
ASIME recomienda que para evitar la sustracción internacional de menores, se pida la autorización judicial de traslado. Así los hijos pueden establecerse legalmente en otro país, y las madres respirar tranquilas. Con esta autorización, no hay orden de retorno.
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